FERNANDO HIERRO, EL MARISCAL BLANCO

Ante el Valladolid-Real Madrid de este fin de semana vamos a recordar a jugadores que pertenecieron a los dos equipos. Debido a las buenas relaciones que siempre han mantenido los dos clubes el trasvase de futbolistas entre ambos equipos ha sido constante. Muchos jugadores blancos han jugado en el equipo pucelano bien como cedidos o traspasados. Es el caso de jugadores como Portugal, Ito, Francis, Alberto Marcos, Iván Campo, García Calvo, Tote, Julio Cesar, Fernando o Alberto bueno, entre otros. Sin embargo, en la memoria madridista aparecen jugadores que vinieron desde el Valladolid para triunfar en el equipo blanco. Así hablamos de Sanchís padre, Amavisca, el portero César Sánchez, Heinze o ese gran futbolista que fue Fernando Hierro.

Fernando Hierro fue uno de los mejores defensas que el equipo blanco ha disfrutado. Por su polivalencia, jugó de interior, mediocentro, defensa central y libre. Poseía un gran disparo que le permitió ser un defensa muy goleador. Infranqueable por arriba tenía también un gran sentido de la anticipación y colocación. Era un seguro a la hora de sacar el balón jugado desde atrás y desnudaba las defensas rivales con sus precisos pases en largo. Durante los 14 años que permaneció en el club consiguió muchos títulos, con tres Copas de Europa y dos Intercontinentales en el plano internacional y solo en dos temporadas no logró ningún título.

Se formó en la cantera del Vélez Club de Fútbol de su localidad natal, Vélez-Málaga. En 1986 fue fichado por el Real Valladolid Club de Fútbol a consejo de su hermano Manolo Hierro, que ya militaba en el club vallisoletano. Tras jugar en el Real Valladolid Promesas debutó en Primera División el 4 de octubre de 1987, en un partido frente al Real Club Deportivo Español. Cantatore vio rápidamente sus cualidades para desenvolverse en la defensa y en la medular que le prometían un brillante futuro. De hecho, se incorporó a la primera plantilla del conjunto pucelano en 1987. A partir de aquel debut siempre fue titular, y marcó su primer gol en la máxima categoría el 27 de marzo de 1988, en un partido en el estadio José de Zorrilla frente al Mallorca.

En 1989, apenas un mes después de jugar la final de la Copa del Rey contra el Real Madrid, su club llegó a un acuerdo con el Atlético de Madrid para su traspaso pero el mismo jugador manifestó su preferencia por jugar en el club madridista, por el que acabó firmando por unos doscientos millones de pesetas (1,2 millones de euros) y que acabaría convirtiéndose en el club de su vida.

VIDEO FICHAJE POR EL ATLÉTICO

Dicen las malas lenguas que el FC Barcelona también lo seguía de cerca, pero que se equivocó y fichó al otro Hierro del equipo pucelano, que, según las referencias de los ojeadores azulgranas, «tenía un futuro prometedor». No era otro que el hermano mayor de Fernando, el mencionado Manolo, una de las figuras del Valladolid, en el que también estuvo a punto de militar el hijo primogénito de los Ruiz Hierro, Antonio, que, sin embargo, si jugó en el Málaga.

El entonces vicepresidente del Barça, Joan Gaspart, aseguró que habían ofrecido por Fernando la descomunal cifra de 150 millones de pesetas, que fue la que pagó el Real Madrid por hacerse con sus servicios, más 50 millones de indemnización al equipo pucelano para que Hierro no jugara la Supercopa de aquel año con el que aún era su equipo, el cual, por haber sido subcampeón de la Copa, debía disputarla contra el Real Madrid, que aquella temporada consiguió doblete.

En su primera temporada, ya fue titular indiscutible con Toshack como mediocentro en un equipo que ganaría la liga con un record de 107 goles marcados, a los que él contribuyó con 7. El equipo arrolló en la Liga con un centro del campo formado por Hierro, Schuster, Michel y Martín Vázquez.

La llegada de Radomir Antić fue muy beneficiosa para Hierro ya que le dio más libertad para llegar al área contraria y el malagueño cumplió con creces. En esta temporada 91-92 fue el máximo goleador del equipo con 21 goles. Resulta anecdótico que Hierro logró esta temporada su primer hat-trick y su primer póker de goles contra el mismo rival, el Espanyol. En Sarría consiguió tres goles para la victoria por 1-5 y en el Bernabéu marcó 4 goles para un total de 7-0.

Vídeo resumen Espanyol 1-5 Real Madrid

En la siguiente temporada, a las órdenes de Benito Floro, bajó un poco su registro goleador pero acabó con 13 goles solo por detrás de Iván Zamorano. Eran los años en los que sufríamos el aciago destino de Tenerife.

En la 94-95, el técnico Jorge Valdano le situó definitivamente como central tras la llegada a Chamartín de Fernando Redondo. Fue todo un acierto ya que formó una gran pareja de centrales junto a Manolo Sanchís. Esa solidez defensiva fue decisiva para reconquistar la Liga que se había resistido unos años. De esos años compartiendo el centro de la defensa con Sanchís adquirió la sabiduría que luego demostraría como capitán y que sirvió para realizar la transición entre la Quinta del Buitre y el Madrid de la Séptima.

De hecho, Hierro se mantuvo como referente del vestuario con la llegada de Capello para conseguir su tercera liga. Desde esta temporada hasta su marcha del Real Madrid, Hierro logró todas las temporadas al menos un título.

Sus cifras goleadoras se fijaron en unos 6-7 goles por temporada. En la temporada siguiente, bajo las órdenes de Heynckes se alzó en Amsterdam con la tan querida séptima Copa de Europa para el Real Madrid.

Los títulos se suceden: Copa Intercontinental, ligas, Supercopas de España y Europa. Pero sin duda los más especiales fueron la octava (en la que no fue titular) y la novena, ambas bajo la sabia dirección del vestuario de Vicente del Bosque.

El 24 de marzo de 2001 superó la cifra de cien goles con la camiseta del Real Madrid y la cifra de 400 partidos en Primera División. Tras la retirada de Sanchís en 2001, Hierro se convierte en el capitán del equipo. Esa misma temporada el Real Madrid, que comenzaba la “era galáctica” con el fichaje de Figo, ganaba la Liga. En sus últimos dos años como capitán blanco dio la bienvenida a Zidane y Ronaldo Nazario.

VIDEO FERNANDO HIERRO, EL GRAN CAPITÁN 

Hierro deja el Real Madrid al final de la temporada 2002-2003 conquistando la Supercopa de Europa, la Copa Intercontinental y su quinta liga. Su salida, no sin polémica, coincidió con la de Vicente del Bosque ya que Florentino Pérez quería dar un nuevo rumbo a la plantilla madridista. Hierro aceptó una oferta para jugar en el Al-Rayyan de Qatar. En 2005, firmó por el Bolton Wanderers inglés donde compartiría vestuario con Iván Campo que se había convertido en el ídolo del equipo. Al final de esta temporada, Fernando Hierro anunciaría su retirada del fútbol profesional.

Indiscutible también con la Selección, uno de sus goles más importantes lo realizó en la fase de clasificación para la Copa del Mundo de 1994, al clasificar a España para ese torneo, tras anotar el gol de la victoria en el partido clave ante Dinamarca en Sevilla, a la salida de un saque de esquina, encontrándose el combinado español en inferioridad numérica tras la expulsión de Zubizarreta. Tras 13 años acudiendo a las convocatorias del equipo nacional, Hierro dijo adiós en el Mundial 2002. Fue internacional 89 veces y capitán entre 1998 y 2002. Debutó el 20 de septiembre de 1989, en un amistoso ante Polonia (1-0), y es el cuarto goleador histórico de la selección española, con 29 goles, tras de David Villa, Raúl González y Fernando Torres.

GOL DE HIERRO EN EL ESPAÑA-DINAMARCA   

Pocas horas antes de jugar los cuartos de final contra Corea en el Mundial de 2002, anunció públicamente que al acabar el campeonato renunciaría a la selección nacional, de la que Andoni Zubizarreta le legó el brazalete de capitán en 1998. Dejaba el testigo a su delfín y amigo Raúl, el único jugador con un perfil idóneo para suplir adecuadamente a su maestro.

Tras su retirada Hierro ha trabajado en diferentes puestos en la Federación española de Fútbol, fue director general del Málaga, ha sido ayudante de Ancelotti en el Real Madrid y se estrenó como entrenador en el Oviedo. Finalmente, dirigió a la selección española en el Mundial de Rusia 2002, tras la destitución de Lopetegui.

Por su trayectoria el futbolista malagueño fue condecorado con la Medalla de Andalucía en 1996 y con la Medalla de Oro de la Real Orden del Mérito Deportivo en 2002.

PALMARÉS CON EL REAL MADRID Y LA SELECCIÓN ESPAÑOLA

5 Ligas

1 Copa del Rey

5 Supercopas de España

3 Copas de Europa

2 Copas Intercontinentales

1 Supercopa de Europa

601 Partidos oficiales

127 Goles marcados

89 veces internacional con España (29 goles)

© José Luis Alises Moreno – La Gran FamiliaÚbeda