BECKENBAUER JUEGA EN EL REAL MADRID
Este lunes ha fallecido el mejor futbolista alemán de la historia, Franz Anton Beckenbauer. De haber nacido en el Reino Unido a buen seguro que llevaría a gala el título de “Sir” como el auténtico caballero que fue. La carrera del alemán fue muy larga y exitosa tanto de jugador como de entrenador (campeón del mundo en ambos puestos junto al brasileño Zagallo, también recientemente fallecido, y Didier Deschamps) pero el azar decidió que solo visitara en una única ocasión el Santiago Bernabéu y fue con su Bayern.
El pequeño Franz de los años 50 tenía como ídolo a Fritz Walter pero también soñaba con ser como Bobby Charlton o Alfredo di Stéfano por su forma de jugar por todo el campo. Todo eso lo trasladó a su forma de entender el fútbol y empezó a distinguirse por su elegancia en el centro del campo. Su gran visión de juego hizo que su posición se fuera retrasando hasta la posición de líbero. La prensa de la época aplaudía su reconversión y le atribuían el mérito. Sin embargo, el “Kaiser” les recordó que la figura del defensa que era capaz de sacar el balón bien jugado y pegado al pie no era nada nuevo y que él lo había aprendido de la leyenda madridista José Emilio Santamaría, al que el reconocía como el primer líbero de la historia.
Beckenbauer llevó a la selección alemana a las final del mundial ’66, a las semifinales de México ’70 y alcanzaría el título mundial en su propio país en 1974. En ese equipo jugaban los también madridistas Paul Breitner y Gunter Netzer.
A nivel de clubes, con su Bayern de Múnich llegó a dominar la escena continental con mano de hierro ganando 3 Copas de Europa consecutivas. En la edición de la temporada 75-76 se produjo su única visita al Santiago Bernabéu. Su visita al estadio blanco se produjo cedió en la Copa de Europa de la temporada 75/76. Fue en el partido de ida de las semifinales donde el “Kaiser” mostró su liderazgo dentro y fuera del terreno de juego. Las crónicas periodísticas se deshacían en elogios hacia él nombrándolo mejor jugador del partido. En AS afirmaban que Beckenbauer había hecho “un partido completo, cortando juego y creando fútbol para sus compañeros”. El partido terminó con empate a uno (goles de Gerd Müller y Roberto Martínez) jugando el Real Madrid con las importantes bajas de Pirri y Breitner. Sin embargo, el partido pasaría a la historia por el “loco del Bernabéu” ya que un aficionado saltó al terreno de juego y agredió con un puñetazo al colegiado austriaco Linemayr.
En la vuelta, los alemanes derrotaron al Real Madrid por 2-0 (ambos goles de “Torpedo” Müller) en el que sería el último partido de Amancio Amaro en competición europea y donde terminaría expulsado.
Franz Beckenbauer siempre mostró admiración por el Real Madrid. Desde niño siguiendo al mítico equipo de las 5 Copas de Europa tal y como confirmó en la visita que hizo al estadio Santiago Bernabéu y la ciudad Real Madrid el 22 de junio de 2015.
Otra prueba de ello es la mítica frase que se le atribuye: “Para ganar una Champions, hay que tener un buen equipo, un gran entrenador y ganar al Real Madrid”.
De hecho de las 6 Copas de Europa que posee el Bayern de Múnich dos las logró tras derrotar en semifinales al Madrid (en 1976 y en 2001), mientras que el Real Madrid alcanzó 5 triunfos en Champions tras derrotar al Bayern, bien en cuartos de final (2002, 2017), bien en semifinales (2000, 2014 y 2018). ¡Qué bonito hubiera sido ver este clásico europeo en una final de Champions!
El Real Madrid puede además presumir de tener en sus vitrinas un trofeo con su nombre. En agosto de 2010, el Real Madrid se llevó la “Copa Beckenbauer” (torneo veraniego organizado como homenaje a su leyenda por el Bayern de Múnich) tras ganar en la tanda de penaltis de un partido que terminó con empate a cero. En ese partido Casillas fue el gran protagonista al detener un penalti en el tiempo reglamentario y dos más en la tanda de penaltis.
Para terminar, vuelvo al título del artículo. Es mentira, nunca vistió el “Kaiser” la equipación blanca del Real Madrid. Pero si lo vieron los aficionados madridistas de los años 70 en la personalidad de Breitner y en la clase de Gunter Netzer, compañeros suyos de selección. Y yo también lo veo hoy en día, con el 8 a la espalda. Beckenbauer juega en el Real Madrid cuando veo la elegancia y jerarquía de Toni Kroos.
© José Luis Alises Moreno – La Gran Familia Úbeda
