Carletto o el eterno retorno

A estas horas ya todo el madridismo sabe quién dirigirá la nave blanca en un principio durante los próximos tres años, Carlo Ancelotti. Y nos encontraremos opiniones para todos los gustos. Habrá gente que diga que segundas partes nunca fueron buenas, que ya es un técnico veterano, que viene del Everton de hacer un gran comienzo de liga en la Premier pero que ha acabado derrumbándose… Este último dato lo recordarán algunos en su segundo año en el Real Madrid.

Venimos de ver la segunda parte de Zidane como entrenador, aunque exitosa, no tanto como la primera. Y no debemos olvidar que lo que ha sido Zidane en el Real Madrid, una gran parte lo aprendió de la mano de Ancelotti mientras fue su segundo (incluso esa manía de no pensar en los cambios hasta que llegaba por lo menos el minuto 60).

Sin embargo, hay mucho y bueno que recordar de Carletto. En las dos temporadas que dirigió el vestuario blanco se pudo ver una futbol atractivo con grandes cifras goleadoras (equipo más goleador en Liga con 104 y 118 dianas) y encajando en ambas campañas un gol por partido. El único pero, no haber conseguido el título de Liga.

Antes de ello, pudimos disfrutar en la temporada 13-14 de una racha de 31 partidos sin perder en todas las competiciones. Estuvo luchando hasta el final en la primera liga que se llevó el Atlético de Simeone. Sin embargo, se ganó la Copa del Rey con aquella galopada mítica de Bale por la banda de Mestalla y, lo que más tiene el madridismo en su memoria, esa Champions de Lisboa, sin desmerecer la el 0-4 en la semifinal con el Bayern.

El equipo estaba muy asentado y comenzó la segunda temporada de Ancelotti en el Madrid con el triunfo en la Supercopa de Europa frente al Sevilla. La Supercopa de España, en cambio la perdimos ante el Atlético de Madrid. Esto hizo que se empezara la temporada de forma dubitativa. Pero a partir del primer partido de la liguilla de Champions (victoria 5-0 sobre el Basilea) el equipo encadenó una racha espectacular de juego y resultados que llegaría hasta la final del Mundial de Clubes que se conquistaría frente al San Lorenzo de Almagro. Fueron 22 victorias consecutivas con un juego preciosista y con victorias de mérito ante el Schalke 04, el Barcelona o ante el Liverpool en Anfield.

Ese gran juego fue fruto de mantener prácticamente al mismo equipo sobre el campo, sin rotar apenas la plantilla que tenía a su disposición. A partir de ahí, se produjeron altibajos en el rendimiento del equipo que hicieron que el Barcelona remontara para hacerse con la Liga. Al igual que ha pasado en esta última temporada, el Real Madrid, desfondado físicamente, caería en Copa contra el Atlético de Madrid y en semifinales de Champions ante la Juventus. Al final de la temporada, Ancelotti abandonaría el club con un buen palmarés pero dejando un sabor agridulce debido al final de esa campaña.

Pienso que la nueva llegada de Ancelotti al Madrid pone de manifiesto la preferencia de las altas esferas del club por entrenadores que gestionen bien el vestuario por encima de estrecheces tácticas. Ahí quedaron los ejemplos de Camacho, Benítez o Lopetegui que salieron del club por problemas de carácter o de rigidez en el aspecto táctico. Sin embargo, entrenadores como Del Bosque o Zidane, que no encorsetan tanto al jugador dieron mayores momentos de gloria al Real Madrid. De ahí, me alegro que no se haya contratado a Antonio Conte, entrenador de mano firme. Ha ganado títulos con el Chelsea o el Inter pero de los que ha acabado saliendo por problemas de egos con algunos jugadores de esas plantillas. Y de Raúl, pienso que es preferible que adquiera más experiencia antes de recalar en la primera plantilla, ya que podría quemarse antes de lo esperado y ni él ni el Real Madrid deberían llegar a ese punto.

Las incógnitas del nuevo Ancelotti residen en cómo resolverá la renovación de la plantilla y ver si ha aprendido de los errores del pasado. Si es capaz de rotar la plantilla, que debe ser bien reforzada, puede mantener ese bonito juego que nos brindó y acabar la temporada bien físicamente de la mano del también recuperado Pintus.

Desde “La Gran Familia” de Úbeda deseamos a don Carlo Ancelotti muchísima suerte para que conquiste la mayor cantidad de títulos posibles para el Real Madrid.

 

© José Luis Alises Moreno – La Gran Familia Úbeda