11 Histórico de Capitanes del Real Madrid – Delanteros

En un artículo anterior hablamos de Julián Palacios como el delantero que fue el primer capitán del Real Madrid. Ahora toca hablar de los otros dos capitanes más carismáticos en esa posición: Santiago Bernabéu y Raúl González.

Santiago Bernabéu (1915-1921) es la piedra angular sobre la que se ha forjado la impresionantes historia de nuestro club. El que fuera el presidente más importante de la historia blanca se mantuvo en el cargo durante 35 años. En esos años el club conquistaría 16 ligas, 6 Copas y 6 Copas de Europa.

Santiago Bernabéu de Yeste nace el 8 de junio de 1895 en Montealegre del Castillo, en la finca “La Cueva” que su padre, abogado de profesión, administraba. Su madre era de origen cubano. Con solo cinco años la familia Bernabéu se trasladó a Madrid. Santiago Bernabéu estudia en el Real Colegio Alfonso XII de los Agustinos en San Lorenzo de El Escorial; ahí se produce su primera toma de contacto con el fútbol, como el mismo decía “para quitarse el frío”. Hizo el bachillerato en el Instituto Cardenal Cisneros y pese a que en un principio quiso cursar la carrera de medicina, finalmente estudió Derecho en la Universidad Central por consejo paterno. Aunque se licenció como abogado, nunca ejercería esa profesión.

 

BERNABÉU FUTBOLISTA

Tras su paso por los Agustinos siguió jugando al entonces llamado “foot-ball” en la Sociedad Gimnástica Española antes de dar el salto a las categorías inferiores del Madrid F.C.  Acudía a ver a sus hermanos Antonio y Marcelo a los partidos. Antonio era un buen delantero que acabaría siendo fundador del Bologna italiano. Por ser alto y fuerte, Santiago estaba predestinado a jugar de portero pero su hermano mayor, Marcelo, lo convenció para que jugara de delantero centro, posición en la que mostraría su verdadera valía. Tenía un potente disparo y un buen remate de cabeza. Su entrega en el campo le hizo jugar a veces como interior pero era un poco lento y tenía dificultades técnicas en el control del balón lo que hizo que le apodaran “el Pato”.

   Santiago Bernabéu en el equipo de El Escorial con el balón

A los 16 años, Bernabéu ya hacía méritos en el juvenil madridista y soñaba con dar el salto al equipo de los mayores. Mientras tanto, no tenía problemas en ayudar al club: ya fuera pintando la valla del campo de O’Donnell, inaugurado también en 1912, quitando piedras, limpiando el terreno de juego… Era su auténtica pasión.

El 3 de marzo de 1912 debutaría con la camiseta blanca. Su debut fue un poco anecdótico ya que a la hora de comenzar el partido contra el English Sports, un jugador madridista, el extremo izquierdo Sotero Aranguren, no había llegado. Su hermano Marcelo, que era uno de los pilares defensivos del equipo, se dirigió a él y le pidió que se cambiara de ropa para jugar con los mayores. Su sueño se cumplía finalmente, marcando además el gol de la victoria.

En la siguiente temporada se asienta en la primera plantilla, donde destacaban jugadores como Aranguren, Machimbarrena, Castell o Sotero. Formaba delantera con un jovencísimo René Petit donde mostraban sus grandes dotes goleadoras. Así, El Madrid F.C. entrenado por Arthur Johnson conseguiría el único título de Copa al que Bernabéu contribuyó, frente al Arenas de Guecho aunque Bernabéu no pudiera jugar la final por lesión. A pesar de ello, consiguió el trofeo al máximo goleador del torneo: marcó 8 goles en los 6 partidos que sí pudo disputar.

Bernabéu en un cromo de la época

Uno de los aspectos menos conocidos de su vida deportiva es que Santiago Bernabéu formó parte del Athletic Club de Madrid durante la temporada 1920-1921. Por motivos laborales tuvo que dejar ese año el fútbol y su amigo Ruete (antiguo jugador del Madrid y en ese momento presidente del Athletic) lo inscribió en el otro equipo de la capital. Por sus desplazamientos a Oviedo también ingresó en el Real Stadium Club Ovetense. Sin embargo, con ninguno de los dos equipos llegó a disputar partidos oficiales ya que la normativa de la época no permitía jugar con otro equipo hasta que no hubiese pasado un año.

Así, Bernabéu volvió al sitio que nunca debía haber dejado. Con el paso de los años empezó a disputar menos partidos debido a que los compaginaba con sus estudios y a la aparición de nuevos valores como Del Campo o  Juan Monjardín.

A lo largo de su trayectoria como futbolista blanco Santiago Bernabéu disputó 79 partidos oficiales en los que conseguiría 68 goles. En lo que a títulos se refiere, conquistó 9 campeonatos regionales y una Copa de España, en una época en la que la Liga como la conocemos ahora no había comenzado aún a disputarse

Aun siendo el mejor goleador de su época, no llegó sin embargo a disputar partido alguno con la selección española.

 

BERNABÉU PRESIDENTE

Santiago Bernabéu se retiró del fútbol en 1927 y prefirió continuar en contacto con el equipo de fútbol. En ese tiempo asumió un cargo como delegado y ayudante del entrenador, y un año después fue nombrado directivo en la junta presidida por Luis Urquijo.​ En 1929 asumió la secretaría de la Junta Directiva del Real Madrid, cargo que ocupó hasta 1935.​ Fueron los años en los que echaba a andar la liga de fútbol española. Comenzaba la profesionalización de las instituciones deportivas y fue determinante para el fichaje de jugadores histórico para el Real Madrid como Ricardo Zamora, Quincoces o Luis Regueiro.

Bernabéu no apoyó el nombramiento en 1935 de Rafael Sánchez Guerra como presidente blanco. Aunque votó en contra se mantuvo como miembro de la directiva.​

Con el estallido de la Guerra Civil española, Bernabéu se refugió en la embajada de Francia durante dos años, pues él era simpatizante de la CEDA y de la Monarquía. Posteriormente se exilió y meses después regresó, en pleno conflicto, para enrolarse en las filas del bando sublevado.

Tras finalizar el conflicto El 15 de septiembre de 1943 fue designado presidente del club. En este enlace podemos ver la noticia del diario ABC con los integrantes de su junta directiva.

Entre otros grandes hitos de su trayectoria presidencial hay que destacar la construcción del nuevo estadio de Chamartín, que años más tarde adoptaría su nombre. En la primera reunión de su Junta Directiva pronunció las siguientes palabras: «Señores, necesitamos un campo mayor y vamos a hacerlo». Y construyó uno con capacidad para 75.000 espectadores. El 14 de diciembre de 1947 se produjo la solemne inauguración ante los portugueses del Os Belenenses.

Con un ojo casi sobrenatural para fichar, Luis Molowny fue su primera gran contratación, en 1945, obra que culminaría en 1953 con la llegada de Alfredo Di Stéfano, el mejor jugador de toda la historia blanca. Los resultados no tardaron en llegar: la siguiente temporada el Madrid conquistaba de nuevo la Liga tras 21 años de sequía. La euforia se apoderó del madridismo.

En 1952 Bernabéu conoce a una persona que se convertirá en su mano derecha. Es Raimundo Saporta, que, procedente de la Federación Española de Baloncesto, crea la sección de baloncesto del equipo y la convierte en otro orgullo madridista haciéndola reinar en Europa (19 Ligas, 18 Copas y 6 Copas de Europa). Con el tiempo pasará a ser vicepresidente y el mejor negociador para acometer los fichajes de tan grandiosos jugadores como Marquitos, Santamaría, Puskas, Canario, Luis del Sol, Didí,… una lista interminable.

A nivel institucional Impulsó la creación de la Copa de Europa junto a las publicaciones francesas L’Équipe y France Football y que ganaría en sus primeras cinco ediciones. Los éxitos deportivos del Real Madrid fueron utilizados por la propaganda del régimen franquista con el fin de buscar una apertura a nivel internacional para el país. Es curioso como el antimadridismo siempre ha aprovechado para atribuir al franquismo los éxitos del Real Madrid, cuando en realidad fue a la inversa. La muestra, el dominio futbolístico en Europa de un equipo que pertenecía a un país aislado política y económicamente y la falta de dominio blanco en la Liga.

 

El 19 de febrero de 1956, Bernabéu compra los terrenos donde se construirá la antigua Ciudad Deportiva del Real Madrid al final de la Castellana, donde se forjarían infinidad de futbolistas que dieron lo mejor en el Real Madrid y en la mayoría de clubes españoles.

Con el paso de los años, la figura de Bernabéu se fue haciendo más paternalista, aunque seguía mostrando su carácter en las charlas que mantenía con jugadores y cuerpo técnico en el vestuario, sobre todo, cuando las cosas no iban como él pensaba: las famosas “santiaguinas”.

En los años finales de su vida, el presidente residió en la localidad de Santa Pola (Alicante), donde tiene una calle con su nombre, y, pese a que continuó al frente de la gestión del Real Madrid, instó a su Junta Directiva a buscarle un sustituto debido a sus problemas de salud.

Fallece el 2 de junio de 1978. A la capilla ardiente instalada en el estadio al que da nombre acuden 100.000 personas. Sus restos serán enterrados en la localidad albaceteña de Almansa. La FIFA declaró tres días de luto para rendir homenaje a uno de los grandes patriarcas del fútbol mundial y en todos los partidos del mundial de Argentina’78 se guardó un minuto de silencio en su memoria. Luis de Carlos, tesorero hasta entonces, le suplió tras un periodo de interinidad de Raimundo Saporta.

Siempre se le consideró como un hombre de gran honestidad y honradez. Como anécdotas ya legendarias cabe destacar que no aceptó que el Real Madrid le pagara un sueldo como presidente (ya enfermo de cáncer en sus últimos días prohibió a su mujer aceptar una pensión del club).

Por su fuerte carácter Bernabéu tuvo varios desencuentros con dirigentes franquistas, algunos de los cuales pudo haberle costado la vida. Se enfrentó con el general Millán Astray, fundador de la Legión Española y compañero de armas del general Francisco Franco. Millán Astray asistía en el palco de invitados del estadio Chamartín a un partido y se propasó con la esposa de uno de los invitados. Don Santiago, al enterarse del incidente, subió al palco de invitados y expulsó al general prohibiéndole la entrada en el estadio. Millán Astray amenazó a Don Santiago de muerte y sólo la intervención del general Muñoz Grandes, a cuyas órdenes sirvió Don Santiago en la Guerra Civil, impidió que el asunto fuera a mayores.

En vida recibió multitud de reconocimientos y homenajes como por ejemplo la Medalla de Oro y Brillantes de la Real Federación Española de Fútbol, de manos de su presidente Pablo Porta, y la Medalla de Oro al Mérito Deportivo que le otorgó personalmente el Rey Juan Carlos I. En 2002 recibió a título póstumo la Orden del Mérito de la FIFA.

El legado que nos dejó nuestro estadio, un gran torneo veraniego, ahora venido a menos y la época más gloriosa que ha vivido nuestro club. Se puede decir que con Santiago Bernabéu el Real Madrid pasó a otra dimensión.

 

Raúl González (2003-2010)

Este otro mito del madridismo fue capitán de 2003 a 2010, año que abandonó rumbo al Schalke 04 alemán. Aprendió de dos grandes capitanes del Real Madrid como fueron Sanchís y Fernando Hierro. Gracias a ellos y a su gran personalidad supo encarnar los valores del madridismo de entrega y sacrificio hasta el último día. En un artículo anterior ya repasamos su trayectoria en nuestro club y aquí os dejamos el enlace para que volváis a disfrutarlo.

Artículo Rául González

Para terminar con este artículo, hay que resaltar que a lo largo de la historia, el Real Madrid ha tenido otros capitanes que también fueron importantes aunque en su momento no lo fueran por demasiado tiempo. Aun así, conviene recordar a todos estos otros capitanes: Miguel Muñoz, Zárraga, Zoco, Amancio, Santillana, Camacho, Sanchís y Fernando Hierro, unos jugadores tan importantes que serán tratados de forma particular en otro momento en nuestra web.

© José Luis Alises Moreno – La Gran FamiliaÚbeda